Michael Perko

Michael Perko retorna a Lima a inicios de los 90’s. En este tiempo retoma la cátedra en la Facultad de Arte y Diseño de la PUCP, como profesor contratado. Este regreso a la docencia coincide con el último periodo de vida de su abuelo y fundador de la facultad: Adolfo Winternitz.. Michael Perko, por su filiación, representaba una oportunidad nueva de contacto y cercanía con la fuente de conocimiento fundacional, además, una opción docente distinta y renovada de retroalimentación para los estudiantes por su estancia de estudios en otras latitudes.

Ante el advenimiento del nuevo milenio, Michael Perko tuvo una presencia activa en las labores académicas y administrativas de la facultad como miembro recurrente del consejo y como coordinador de sección, alternando entre la especialidad de pintura y formación general. La labor activa desde estas instancias le permitió desplegar estrategias de innovación docente que tuvieron como objetivos revisar y adaptar la metodología de enseñanza y aprendizaje del arte y el diseño, acorde al cambio de época que se estaba viviendo, y del mismo modo, renovar el vínculo de la facultad con el entorno y la sociedad.

Para tal propósito, establece un diálogo más cercano con los docentes bajo su coordinación. De ello se destaca el estrecho vínculo que construye con el equipo docente del curso de Dibujo Geométrico, quienes venían incorporando en su metodología de enseñanza algunas innovaciones con relación al sistema de evaluación y acompañamiento, la inclusión y uso de tics en clase y el patrimonio cultural peruano como tema de análisis del curso. Por estas razones y porque consideraba al dibujo un tema común e importante para todas las especialidades en la formación general, decide incorporar el curso de Dibujo Geométrico en la nómina de cursos artísticos en la revisión final con jurado de los estudiantes, de modo que se propicie un diálogo común y más amplio entre los docentes de los diferentes cursos, en torno a los resultados y logros de aprendizaje, la interconexión de los cursos y especialidades, la continuidad y apertura en los temas y el sistema de evaluación y calificaciones, que había permanecido tradicionalmente estancado en un intervalo estrecho y no muy alto.

Otro de sus aportes más resaltantes a nivel metodológico fue la renovación del enfoque del análisis de la representación en sus cursos de dibujo y composición. En estos incorpora como estrategia el aprendizaje basado en proyectos, con el fin de que el estudiantado desarrolle una variedad amplia de propuestas y soluciones visuales, que den cuenta de la problemática planteada y sus intereses personales. Para ello, incorpora ejercicios y actividades, como la danza, la música, la poesía, el cine, el cómic o la animación, y diversos medios que hagan partícipes los diferentes canales perceptivos de los involucrados, para ampliar el espectro de análisis y estudio de la representación, que hasta ese entonces era solo obtenido a partir de la observación y la contemplación. Del mismo modo, este nuevo enfoque propuso y persiguió el reto de despertar y mantener la motivación de los estudiantes, con temas más acorde a su tiempo y realidad.